Fome

stoy en una nueva etapa en mi espectacular y vertiginosa carrera musical, aquella que decenas de cientos de miles de fans en todo el mundo siguen día a día (M, ijo la múa). Ahora estoy dedicándome a hacer música instrumental.

Para ser un aficionado, por muy aficionado que se sea a algo, hay que tener un mínimo nivel, y mi piedra de tope es la interpretación musical y la composición. Si se trata de interpretar algún tema existente difícil, puedo hacer el esfuerzo y lograr una versión a lo menos no vergonzosa; pero en lo que respecta a la composición… aquellos que saben de música ya notaron hace tiempo que me doy vuelta en 4 o 5 acordes y en la misma escala en los solos.

Pues bien, para obligarme a mejorar aunque sea un 1% de mi nivel musical, es que me decidí a dejar de lado las letras y los juegos vocales y dedicarme a componer sólo música. Los resultados son fomes, pero por algo hay que empezar. Ahora dejo con ustedes un tema instrumental que ideé durante la semana, y que depuré y grabé ayer; creo que con sólo leer el título de la composición se darán cuenta del nivel del tema, así que aún pueden escapar sin escucharlo. Con ustedes, Fome. Saludos sangrientos.

Fome